Como todos y cada uno de los códigos sagrados, este no es una salvedad y para activarlo hay que repetirlo precisamente 45 ocasiones. Igual que todos.
Su peculiaridad es que mientras que lo repites, tienes que imaginar la intención por la que invocamos siendo de luz como real.
¿De qué forma encender el Código Sagrado 541?
La manera de encender este código para hacer mas fuerte el cariño en una pareja de manera fácil sería la próxima:
- El código 541 hay que reiterar 45 ocasiones, por el hecho de que es el número de manifestación, en Aparte de insistir en las 45 ocasiones el encontronazo de adentro es profundo.
- Las ocasiones que uses los Códigos Numéricos Sagrados, en un caso así 541, va a ser tu resolución. O sea, se puede emplear en tantas ocasiones hasta el momento en que se cumpla la intención que se le solicita.
- El ensayo se puede llevar a cabo cualquier ocasión y en cualquier sitio.
- El Número Sagrado para hacer mas fuerte el cariño en una pareja se puede decir en un solo número, uno a la vez o en bloques. Se puede decir mentalmente o empleando la voz.
- Se puede utilizar a otra gente, para eso basta utilizar la intención y decir: “Este Código lo aplico para (nombre y apellidos)”
Código Sagrado 191919 para captar un individuo
El poder universal contenido en el código sagrado 191919 para captar un individuo nos va a ayudar a integrar en nuestra vida a esa persona que amamos con la que deseamos comunicar nuestro tiempo y vivir novedosas vivencias.
Al apoyarnos en el código sagrado 1150 para atraer el cariño, conseguiremos que el cariño que nos corresponde llegue mucho más veloz, puesto que lo que el destino nos ha concedido, absolutamente nadie puede evitarlo.
Reconstruir la relación tras una traición
Meditar fuera de la caja es precisamente lo que deseas en tu sexualidad. Conque primero te olvidas de todo cuanto sabes sobre el sexo… Y después prosigues una sucesión de pasos con tu pareja para conseguir el exitación y el placer sexual… de una manera diferente.
No procuramos “acrecentar el deseo” pensando en el último orgasmo o en el pecho desvisto de nuestra vecina de enfrente. Dejamos que las ganas broten de manera natural, tomándonos el tiempo preciso para relajarnos. Baños, masajes, trueque de miradas, expresiones dulces, besos tiernos… No nos impulsamos ni nos marcamos objetivos. Aprovechamos cada instante sin meditar en el próximo: si un beso te ofrece ganas de acariciar, te dejas llevar. Si no se siente bien, se va a sentir bien después o en otro instante. Asimismo planeamos con mucha antelación. En el sexo sagrado, el exitación dura, y no es extraño que el acto dure una o aun múltiples horas.